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Obtén una rutina personalizada en 3 pasos
Para mitigar el impacto psicológico de la caída del cabello, puedes tomar la iniciativa acudiendo a especialistas en este campo, como técnicos capilares o peluqueros. Ellos podrán ofrecerte el corte más adecuado antes del inicio del tratamiento y aconsejarte sobre la amplia gama de soluciones disponibles, como prótesis capilares sintéticas o naturales, turbantes de algodón o flequillos. También puede preferir sombreros, gorras, boinas, gorritos, pañuelos, o permanecer con la cabeza descubierta.
CUIDA
TU PELO
No dudes en consultar al socio estético de tu hospital o de una asociación que ofrezca talleres de belleza. También puedes hablar con un dermatólogo, tu enfermera de referencia, un socio-peluquero o un peluquero. Ellos te ayudarán a desarrollar tu nueva imagen.
1. LAVA TU CABELLO CON UN CHAMPÚ MUY SUAVE EL DÍA ANTERIOR A LAS SESIONES
2. USAR UN GORRO FRÍO SOBRE EL CABELLO HÚMEDO ANTES DE COMENZAR LA QUIMIOTERAPIA PUEDE AYUDAR A PREVENIR LA CAÍDA DEL CABELLO
3. CONSEJO PROFESIONAL PARA PROTEGER EL CUERO CABELLUDO POR LA NOCHE
CONSEJO PROFESIONAL
Acuéstate con una red sobre el pelo o con una funda de almohada de algodón satinado. Una de las primeras ventajas de este material es que limita al máximo la fricción, en comparación con el algodón o el lino, por ejemplo.4. PROTEGE TU CUERO CABELLUDO PROPORCIONÁNDOLE LOS CUIDADOS ADECUADOS
5. NUESTRO CONSEJO ¿TE PICA LA PRÓTESIS CAPILAR?
NUESTRO CONSEJO
¿Te pica la prótesis capilar? Françoise Coubron, una antigua paciente, encontró la solución creando un gorro patentado, innovador y práctico: Clim'Hair (climhair.com).6. ELIGE PRODUCTOS CAPILARES QUE AYUDEN A CALMAR EL CUERO CABELLUDO
PRODUCTO QUE RECOMENDAMOS
PARA MANTENER EL CABELLO Y EL CUERO CABELLUDO
ESTILO
PROPIOJulie Meunier Fundadora de Franjynes - Lesfranjynes.comHace cinco años, sufrí un cáncer muy agresivo que me costó 18 meses de quimioterapia durante los cuales me quedé completamente calva. Intenté llevar una peluca, pero no me sentía identificada. Entonces, empecé a hacerme turbantes porque gracias a ellos encontré la sensación de mi pelo. Pero no tener ni pestañas ni cejas era bastante estigmatizante. Una cosa llevó a la otra, y creé un sistema de flequillo postizo que se sujeta a la cabeza gracias a un sistema patentado, sobre el que se puede poner un gorro o atar un turbante. Gracias a este invento, que quise compartir al crear los Franjynes, recuperé mi identidad y mi autoestima. No había elegido la enfermedad, pero ahora podía elegir la gestión de estos estigmas visibles y difíciles.